La meta de toda comunicación es conquistar un territorio en la mente del público y que los difusores del mensaje sean los propios consumidores o usuarios. El boca a boca. Pero ¿cómo lograrlo? ¿Qué tienen en común esos mensajes que se “viralizan”? Propongo una aproximación a este asunto.

El sentido de pertenencia es la satisfacción que produce en una persona el pertenecer a un grupo. Y es también un impulso: a todo el mundo le gusta pertenecer, ser de los pocos que… De ahí que la publicidad y la comunicación apelen a esa necesidad humana para llamar la atención y hacerse un lugar en la mente del consumidor.

212

“Esto sólo lo saben unos pocos”, “esto no es para cualquiera”, “sólo para entendidos”… son todas invitaciones a pertenecer. Ser parte un grupo exclusivo, reducido, privilegiado. Eso es lo que todo el mundo, de alguna manera, disfruta. “¿Sabías que tal cosa?” tiene sentido el comentario, porque también está diciendo “Yo pertenezco, y te muestro que pertenezco”.

Y este principio resulta muy importante en Comunicación. Porque quien quiere difundir una idea o un producto, debe procurar construir un mensaje que contenga ese gancho del sentido de pertenencia. Un mensaje que sea digno de ser contado. Que quien porte ese mensaje desee compartirlo porque contarlo hablará bien de él. Un mensaje diseñado con sentido de pertenencia garantiza que el que lo difunde queda bien. El mensajero queda bien por conocer ese contenido. Por eso el título de este post: hay que buscar algo que genere ese “esto hay que contarlo”.

¿Cómo se logra eso? Hay muchas maneras, pero acá van tres pistas:

  1. Humor: quien lo comparte es gracioso, alguien con sentido del humor, lo que de alguna manera consolida sus lazos y da sentido de pertenencia. El mensajero queda bien. Un ejemplo es este comercial divertido, que probablemente ya se lo mostraron, o querrá usted mostrarlo:

 

  1. Dato no conocido: quien tiene el dato que nadie tiene es al menos alguien bien informado, o con llegada a fuentes poco accesibles. El mensajero queda bien. Un ejemplo es el video motivador que Ramón Díaz le mostró al equipo de River segundos antes de enfrentar a Boca el domingo pasado, y que fue replicado miles de veces en Twitter: https://www.youtube.com/watch?v=Frh-jY7Y9G0
  1. Sentido práctico: transmitir algo útil y de uso práctico. Quien conoce esa información práctica es también una persona inteligente. El mensaje prestigia al mensajero. Un ejemplo es este consejo para hacer una llamada privada desde un Smartphone: https://www.youtube.com/watch?v=NHCiehAhYbM

 

E insisto, hay más caminos para lograr ese mensaje que se difunde solo porque “esto hay que contarlo”.